Banmédica decide mantener en sus cargos a ejecutivos implicados en bonos irregulares

Le llueve sobremojado al grupo Penta. Su holding del área de la salud, Banmédica -que controlan junto al empresario Eduardo Fernández León-, una de las pocas firmas que se había mantenido al margen del escándalo, está viviendo uno de sus momentos más complejos, tras la renuncia de quien fuera su gerente general corporativo por 26 años, Carlos Kubick.

En un hecho esencial enviado la semana pasada, el presidente de Banmédica -grupo que posee la isapre del mismo nombre, VidaTres y distintas clínicas como la Santa María, Dávila y Vidaintegra-, dio a conocer las razones: "La cesación de sus funciones se debe al pago de sus compensaciones anuales por desempeño y las de otros dos ejecutivos, realizadas de forma irregular, y sin el conocimiento del directorio, por medio de las filiales Centros de Servicios Compartidos Banmédica S.A., y Saden S.A.", señala el documento.

Distintas fuentes del caso confirman que los otros dos ejecutivos inmersos en las irregularidades son Pedro Navarrete, gerente general de la Clínica Santa María, y Fernando Matthews, gerente general de isapre. Este último era uno de los ejecutivos que barajaban en el holding como sucesor natural de Kubick antes de que explotara este caso.

El mecanismo usado consistía en que las asignaciones se le facturaban a estas dos filiales de Banmédica, lo que generaba un beneficio tributario a las personas. "Para la compañía el costo era el mismo, si se hubiera pagado como remuneración, o de la forma que ideó Kubick. No hay daño a los accionistas", destacan desde la firma.

La permanencia de los otros dos implicados
Las irregularidades se consideraron por la totalidad del directorio lo suficientemente graves para que Kubick no siguiera en la compañía, pues él habría ideado el mecanismo y es visto como el único autor intelectual. De todos modos, conocedores del caso dicen que el directorio analizó largamente el asunto, pues no era una decisión fácil. Al ser descubierto, el entonces gerente general también asumió que debía renunciar.

"Kubick armó todo el esquema y eso es grave, tenía que salir de la compañía. El caso de los otros dos ejecutivos es distinto, a ellos simplemente el gerente general del holding les notificó que iban a recibir sus bonos de otra forma. Fueron pasivos en todo esto", revela una alta fuente del caso. Así, es un hecho que por el momento Matthews y Navarrete continuarán en la compañía, "a menos que, más adelante, la auditoría arroje otros antecedentes más graves", sostiene un protagonista.

Fuentes revelan que el pago irregular de estos bonos se mantuvo por "varios años", y se estima que por lo menos fueron cinco. Todo el detalle, al igual que los montos involucrados, está sujeto a los avances de la investigación contable contratada a KPMG, que inició sus pesquisas la semana pasada y que irá reportándole periódicamente al comité de directores, integrado por Alfredo Moreno, Cristián Arnolds y Antonio Tusset. Se espera que en un par de meses la auditora tenga los resultados finales de la investigación.

Dolor por salida de Kubick
"Esto ha sido un drama. A Carlos le tenemos un aprecio enorme, es una extraordinaria persona, pero que cometió un error importante. Ha sido una situación muy complicada, porque Carlos ha contribuido mucho a lo que es esta compañía hoy en día y tenía la confianza y el aprecio de todos los accionistas", dice una alta fuente de Banmédica sobre Kubick.

El directorio sostuvo varias reuniones con el ex gerente general cuando supieron de las irregularidades -investigadas por el SII-, y finalmente firmaron un compromiso por escrito que en caso de que haya que pagar de multas o intereses por parte de Banmédica, Kubick responderá por eso.